La Fortuna de San Carlos o La Fortuna, como es conocida normalmente, es un pequeño pueblo muy tranquilo, que acoge a todo viajero que decida visitar su entorno con los brazos abiertos.
Parque de La Fortuna |
Sin embargo, la gente local, hace su vida normal ajenos a los turistas y viajeros, haciéndote sentir como en casa. La calma envuelve a este rinconcito de Costa Rica, de paso obligado para todo viajero por la espectacularidad de su principal atracción, el
Es un lugar donde debes estar 2 o 3 días para poder disfrutar, al menos, de esta maravilla natural.
Hay muchos comercios, restaurantes y sodas (bares) rodeando el parque, algunos supermercados, touroperadores que te ofrecen tours de todo tipo, un banco con cajero automático y estación de autobús con bastantes destinos.
Buscamos siempre opciones que no sean entrar en la primera tienda, bar o touroperador. En este caso, dimos, por pura casualidad, con una persona que nos ayudó mucho. Es cierto que este país se dedica al turismo y sus gentes viven de él, lo que hace a algunos pensar que todos quieren aprovecharse de ellos, pobre turista, si no que se intentan buscar la vida de forma digna y en la mayoría de los casos con muchísima educación y respeto, cosa que en bastantes ocasiones, no es devuelta por la prepotencia del turista habitual.
Arthur es un Tico muy amable, con mucha sabiduría popular y dispuesto a informarte siempre que se lo solicites. Te ofrecerá tours y, sinceramente, por qué no con él en vez de con otros. Se gana la vida igual que hacemos todos. Además te hará buen precio. Puedes encontrarlo en la Soda (bar) Sabor Tico, que está al lado del parque, en la calle que va hacia la estación de autobuses, cruzando la calle desde el lado del parque que linda con la iglesia.
En SABOR TICO, puedes comer bueno y barato, aunque la soda estéticamente no es nada especial, bastante sencilla, te aseguramos que la comida es de muy buena calidad. Las hamburguesas son de carne de primera, grandes y a un precio inmejorable en la zona. Además tienes una gran variedad de casados (combinados con base de arroz y frijoles y carne o pescado), y otros platos típicos. Bon Apetit!
Blue Jeans sobre la muñeca de Marieta |
alejado (unos 10 minutos andando desde el parque) por lo que es tranquilo. Tiene un pequeño río que lo circunda y puedes ver ranitas blue jeans cada día e incluso tenerlas sobre la palma de tu mano. En la mañana puede que veas algún tucán volando la zona y mucho tipo de aves. Lo mejor es que una habitación privada nos costo unos 20$ para los dos. Con baño privado (aunque no cerrado por arriba, por lo que puede ser algo incómodo si no sois íntimos), aire acondicionado, tv, y una pequeña pila para platos, frigorífico y microondas. Las zonas comunes son algo pobres, ya que no tienen mucho que ofrecer, pero tienes WIFI en todo el hostel. Un punto importante para nosotros es que el personal es muy amable y simpático. En definitiva, para un par de días, nos quedamos con el personal, las ranitas del río y un buen precio.
Nuestra experiencia en La Fortuna fue buena, aunque es cierto que no espectacular, pero resumiendo, si que mereció la pena pasar dos noches en este pequeño remanso de paz de Costa Rica.
COMO LLEGAR A LA FORTUNA DESDE SAN JOSÉ
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